Después del éxito de la película estrenada en 1996 de DragonHeart, se
estrenó otra película en el año 2000. Esta fue una catástrofe, en comparación
con la anterior. Pero aún se quiso continuar la saga. Se estrenó en el año 2015
una tercera parte: DragonHeart 3: The
Sorcerer’s Curse, traducida en España como Dragonheart 3: La maldición del brujo. Fue dirigida por otro
director, Colin Teague, pero sí que en esta ocasión se mantuvo el mismo
director musical: Mark MacKenzie.
(Cuidado: spoilers.) En esta ocasión, la historia comienza con un encuentro
de druidas, en la que Brude maldice a los druidas y los mata con su clan. Lorne,
un aprendiz, logra huir. Luego, en otra parte, hay un entrenamiento de
caballeros. Estos tienen que, además de pasar ciertas pruebas de combate,
recaudar impuestos a los pobres. Gareth, uno de ellos, no logra el suficiente
dinero y es expulsado de la orden de caballeros, cuando estaba a punto de
lograrlo, aunque podrá conseguir el puesto si trae 100 coronas. Cae un
meteorito en las inmediaciones y va a buscarlo. Intenta conseguir un trozo, pensando
que es oro, y aparece un dragón con varios huevos. Aparecen el clan de Brude y
maldice al dragón, de tal forma que en varios días será dominado por Brude, además
de que debe vivir entre las sombras. El dragón defiende a los huevos. Gareth
salva a uno de los huevos, aunque está herido de muerte. El dragón lo salva
dándole parte de su corazón. Así es como pueden comunicarse, porque su vinculación
le ha otorgado el idioma. Como su nombre es muy complicado, se pasa a llamar
Drago. La misión es conservar los huevos. Al poco tiempo, aparece Rhonu con su
hermano, que están en contra del clan de Brude. Dragon está maldito por el
druida. Junto con Lorne, que poco a poco va avanzando en sus estudios
druídicos, Gareth y Rhonu intentarán luchar contra Brude. Son capturados y
Drago queda dominado por Brude. Drago es liberado. Rhonu mata a Brude, pero
queda herida de muerte. Gareth le proporciona un huevo de dragón y así se une
con Rhonu, salvando su vida. Gareth y Rhonu expresan su amor y quedan atados en
la vida y la muerte con sus respectivos dragones, Gareth con Drago y Rhonu con
el bebé dragón.
Esta película, a diferencia de la segunda parte, sí que proporciona un
final más abierto para nuevas futuras aventuras. La anterior, DragonHeart: Un nuevo comienzo, no puede
tener una real continuidad. El problema principal: sólo nació un dragón de
Draco. Sin tener una hembra, ¿cómo se podría haber continuado la especie de
dragones sin poder copular? E aquí la cuestión. Seguramente por esto, se
desestimó la anterior historia y, después de 15 años, se estrenó la tercera
parte, con una historia más o menos lógica. Se supone que el dragón viene del
espacio, es decir, de la constelación Draco, con unos huevos que deben ser
protegidos para preservar la raza de dragones en la tierra. Es muy recomendable
ver esta película para poder seguir viendo la saga.
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