Colección Películas: Cristal Oscuro

Jim Henson fue muy conocido por la creación de unas marionetas de tela dotadas de gran movilidad. Por desgracia, murió en 1990 a los 53 años. Por suerte, nos dejó un gran legado. Por ejemplo, algunas películas del pasado que fueron bastante importantes, tales como The Dark Crystal o Labyrinth. Cristal Oscuro, estrenada en 1982, con el título en inglés The Dark Crystal, es una historia bastante oscura, tal y como se puede suponer por el título.

En la parte trasera de la EDICIÓN 25 ANIVERSARIO en DVD, se puede leer la siguiente sinopsis: “Disfruta de las increíbles imágenes del archivo de Henson en esta edición especial 25º aniversario de CRISTAL OSCURO de 2 discos. Viaja en el tiempo hasta el lejano planeta de Thra. Anima a los Mystics en su lucha por derrocar al malvado Skeksis y recuperar el control de su planeta. Cuando Jen, un miembro de la tribu Gelfling, se marcha a buscar el fragmento perdido del cristal, su peligroso viaje le enfrenta cara a cara con todo tipo de monstruos. Decidido a devolver la paz a su planeta, Jen no se va a echar atrás. De la brillante imaginación de Jim Henson, esta obra maestra de la animación habla del eterno conflicto entre el bien y el mal y se ha convertido en una película de culto para niños y mayores.”

Una magnífica obra en la que se puede ver que el bien y el mal siempre están en las historias más importantes. Ahora bien, en esta historia, el bien y el mal realmente eran unos mismos seres, que se habían separado debido a la ruptura de un cristal de poder. Los Mystics, los buenos, y los Skeksis, los malos, están siempre en lucha, aunque realmente los Mystics lo que hacen es defenderse. Los gelfling, una tribu del planeta casi extinta, logran completar el cristal con el fragmento y unifican de nuevo a los Mystics y los Skeksis, que nunca deberían haberse separado.

Esta historia nos muestra que el bien y el mal está en todos nosotros, aunque no queramos admitirlo. Todos somos buenos y tomos somos malos. El problema deriva cuando uno llega a tener un grado más alto de maldad que de bondad. Debería haber más bondad que maldad, pero en este mundo no logra ser así.