En
el curso 2001-2002, hice el ciclo de Gestión
administrativa en el IES Pau
Casesnoves, un Instituto de Educación Secundaria de Inca (Islas Baleares,
España). En uno de los módulos, FOL
(Formación y Orientación Laboral), nos hicieron hacer un “Projecte Professional”, donde era un pequeño estudio de una
empresa. En el curso anterior, en 4º de ESO, cursado en el mismo centro
educativo, tuve la idea de abrir una empresa como Técnico informático. Para
ello, si quería controlar la parte administrativa también, debería tener dos tipos
de conocimiento: administración e informática. Por ello, los requisitos para esta
simulación de proyecto eran tener el curso de FP de grado medio de
Administración y Gestión (Gestión administrativa) y el FP de grado superior de
Informática o, en su defecto, un curso de informática en una escuela privada.
Los trabajos a realizar, una vez creada la empresa y con un local disponible,
serían arreglar ordenadores y ayudar a la gente y realizar documentos. También
se debían añadir las aptitudes que podían ayudar a desarrollar estos trabajos:
“Sóc
un adolescent molt alegre i obert, reflexiu o metòdic, adaptable en segons què
situacions, amb aptituds de comandament, molt tranquil en els conflictes i molt
actiu per a quasi tot, clar, sobretot molt pacient i complidor, negociador,
persuasiu i algunes més, però que no importa donar-les per escrit.”
Estas
aptitudes aún las conservo, algunas se han incrementado a lo largo del tiempo,
otras no tanto. La paciencia, por ejemplo, es una de mis aptitudes más
importantes. Gracias a la paciencia que he tenido en la vida, he podido conseguir
lo que actualmente tengo: una vivienda, un trabajo como profesor y una colección
muy interesante.
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