Colección Recuerdos: Es Guix restaurant. 27-07-2024

En el curso 2023-2024, un compañero me mostró fotos de un lugar idílico en Lluc, un pueblo de Escorca, una zona muy conocida y espectacular en Mallorca (Islas Baleares). El lugar era Es Guix restaurant, un restaurante de lujo en plena montaña, junto a un safreig (una alberca), una especie de piscina. Durante largo tiempo, tuve ganas de ir a probarlo, especialmente por estar muy cerca de un lugar al que suelo ir a merendar de vez en cuando, llamado Ca’n Gallet, un restaurante con unos buenos pa’mb’oli. Especialmente quería disfrutar de un baño en la piscina del restaurante. Un día, viendo la posibilidad de coincidir con mi pareja en el día y la hora, decidí reservar dos menús en la página web del restaurante. En esta ocasión, decidí por un menú para dos personas, que fue pagado previamente en la misma página web. El día de la reserva fue el 27 de julio de 2024. Por suerte, el día fue soleado y agradable. Llegamos pronto, de los primeros en llegar al restaurante. Nos ofrecieron a utilizar la piscina antes o después de comer. Al llegar, la piscina estaba vacía, por lo que optamos por nadar antes de comer. Para ello, nos pusimos los bañadores y cogimos las toallas, usando los vestidores para ello. Las vistas y la temperatura del agua no estuvieron del todo mal, aunque no estuviera del todo bien limpia, pues se entendía que estaba en un entorno natural y el baño era opcional. Nos ofrecieron un aperitivo antes de comer, mientras estábamos en la piscina. Mi pareja optó por una cerveza y yo un Aperol spritz. Los aperitivos se pagaron a parte. Después del baño, nos volvimos a acomodar para la comida. Para beber, un vino Negre 110 y agua. De entrantes, pan y olivas, típico, croquetas de espinacas y croquetas de calamares. Los platos principales fueron salmón de Noruega y cabrit al forn (cabrito al horno). De postres, gató con helado y biscuit almendrado. Fue una buena comida. Una buena experiencia, especialmente porque pudimos aprovechar la quietud de la piscina, pues cuando nos íbamos, la piscina estaba llena de gente y hacían algo de ruido al tirarse en bomba, algo que no debería permitirse en un lugar así. Ahora bien, salimos bien redondos del restaurante. Luego, para bajar la comida, fuimos a pasear por la zona, viendo las grandiosas vistas de Escorca y sus montañas.