Después
de finalizar el curso de FP de grado
medio de Equipos electrónicos de
consumo, en el IES Pau Casesnoves,
el Instituto de Educación Secundaria en Inca (Baleares) donde estuve un total
de 11 años como alumno, quise acceder al curso de FP de grado superior de Administración de sistemas informáticos,
pero en aquel momento no se podía acceder libremente con un grado medio a un
grado superior. Para ello tenía que superar un examen, una prueba de acceso,
para conseguir una especie de nivelación con el bachillerato, pues con
bachillerato siempre se ha podido acceder a un grado superior directamente. Como
estaba bastante oxidado, decidí matricularme al 1r año de bachillerato. Pude acceder con mucha suerte, pues tenía
la edad máxima para matricularme, que eran 21 años. La edad habitual en el 1r
año de bachillerato es 16 o 17 años. Pero yo tenía 21 años. Por aquel entonces
ya había trabajado en diferentes empresas y en diferentes oficios. Me matriculé
en el curso 2006-2007. Coincidí con varias profesoras que ya había tenido años
anteriores cuando estudiaba ESO, una profesora de Castellano y otra de
Matemáticas. Aquel año pude tener buenas notas, aunque podría haber tenido
mejores. Eso es porque dediqué mucho tiempo en casa a hacer otras labores y no
a estudiar precisamente. Mi nota media fue de 7. Mis notas finales fueron las
siguientes:
- Economia - 7
- Educació física - 6
- Filosofía I - 6
- Història del món contemporani - 6
- Llengua castellana i literatura I - 7
- Llengua catalana i literatura I - 7
- Llengua estrangera – Anglès I - 7
- Matemàtiques aplicades a les ciències socials I - 9
- Tecnologies de la información i la comunicació (TIC) - 8
De
ese año guardo buenos recuerdos, pero también bastante malos. En Economía, una
asignatura de la que merecía más nota, tuve un encuentro negativo con el
profesor. Un día, sin ton ni son, después de haber pasado varios meses de
curso, le pregunté una cosa al profesor en castellano. El profesor me dijo que
no me entendía, que si no le hablaba en catalán no le entendía. Al final le
hablé en catalán, para no tener un enfrentamiento. A partir de ahí, supe que
tenía que hablarle en catalán, pero no me pareció correcto, bajo ningún
concepto, obligarme a hablar catalán en clase de Economía. La nota de TIC fue
bastante baja; debería haber sacado un 10, pero los criterios de evaluación no
quedaban del todo claros y se ignoraba qué se tenía que hacer exactamente para
sacar la máxima nota. Sólo una alumna, hija de una profesora, pudo conseguir
esa nota. Ella mismo me dijo que fue injusto, pues ella mismo sabía que yo
merecía también un 10.
Algunos
otros problemas tuve en bachillerato, pero lo que considero peor es el
compañerismo. No hay compañerismo. Es bastante enfermizo el tema del
bachillerato, pues los alumnos saben que se estudia bachillerato para luego
competir en unos exámenes finales, que es la selectividad, para poder acceder a
la universidad. Por tan solo unas pocas décimas, algunos alumnos se quedan
fuera de la carrera que quieren acceder. Es por ello que no se suelen ayudar
entre los mismos alumnos. Entonces, poca ayuda pude ver entre los mismos
alumnos. Demasiada competitividad. Demasiada falsedad. En una clase de
Castellano la profesora me riñó porque no tenía un trabajo hecho, pero no era
culpa mía. Resultó que enfermé una semana. Cuando llegué, pregunté a los compañeros
de la clase los deberes pendientes y sólo me dijeron algunos ejercicios
básicos, pero no me dijeron nada del trabajo, que era mucho más importante. En
ese momento pude ver que no podía confiar en los compañeros de clase. A partir
de entonces, solicité directamente las tareas pendientes a los profesores si
faltaba a clase.
Al
finalizar bachillerato, recuerdo un momento bastante curioso, en el que varios
jefes de estudios, la directora y mi tutora intentaban convencerme para
continuar con bachillerato. Dejé bien claro que mi intención para con
bachillerato era repasar los conceptos que necesitaba para poder superar la
prueba de acceso. Superé la prueba de acceso y me negué a continuar con el
bachillerato, pues mi interés directo era acceder al curso de FP de grado
superior de Administración de sistemas informáticos.
Cabe
comentar que la prueba de acceso fue bastante complicada. Fue un día, separado
en dos sesiones, una por la mañana y otra por la tarde, después de comer. Fue
en el IES Francesc de Borja Moll. Coincidí con un antiguo compañero del curso
anterior, del curso de FP de Equipos electrónicos de consumo. En esa prueba de
acceso tan sólo superamos el examen unos 4 o 5 de más de 100 alumnos. No fue
fácil superar esa prueba, pero no fue mala decisión acceder al 1r año de
bachillerato para repasar lo necesario para superar dicha prueba.
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