La saga de LA MÁQUINA DEL TIEMPO
consta de 24 tomos, numerados del 1 al 24 en el lomo, que fueron distribuidas
entre los años 1984 y 1990 por TIMUN MAS.
Son historias en las que el protagonista tiene el poder de viajar en el tiempo,
con tal de descubrir secretos del pasado. El título de la saga incluye un
hombre saltando entre un portal de tiempo, un icono fácil de identificar. Para
poder ambientarse en la historia, se dispone de las instrucciones del juego,
las cuatro reglas para viajar en el tiempo, la especificación de la misión, el
equipo, el banco de datos y la lista de datos. Las cuatro reglas para viajar en
el tiempo son las siguientes:
“1. No mates a ninguna persona ni
animal.
2. No intentes cambiar la
historia. No dejes nada del futuro en el pasado.
3. No lleves a nadie contigo
cuando franquees la barrera del tiempo. Evita desaparecer de un modo que asuste
a la gente o la haga sospechar.
4. Sigue las instrucciones
que te dé la máquina del tiempo y elige entre las opciones que te ofrezca.”
Cuando uno ya ha leído las instrucciones, puede introducirse en el juego,
pero antes deberá ver el quipo con el que se empieza en la aventura. Si se
desea, se puede leer el banco de datos, en el que se facilita una ambientación
de los años en los que se va a viajar. Además, si en las opciones se facilita
un icono en concreto, se puede ir a la lista de datos, donde se facilitan
pistas para poder decidir de una forma más acertada, pero sólo si se ha
prestado atención al banco de datos o a la información recogida a lo largo de
la historia.
El séptimo tomo de la saga de LA MÁQUINA DEL TIEMPO es LA ERA GLACIAR, escrito por Dougal Dixon. En la parte delantera del
libro ya se anuncia lo siguiente: “Retrocede
1 millón de años y haz frente a un mamut lanudo en:” y luego aparece el
título. En la parte trasera se facilita algo más de información:
“AÑO 35000 a.C.
Has retrodcedido hasta la época del hombre prehistórico.
Escapas de un grupo de
cazadores de Cromagnon y caes al fondo de un oscuro pozo; apenas logras eludir
las afiladas estacas de madera que contiene.
Notas que el terreno tiembla
cuando un rinoceronte lanudo arremete contra la trampa. ¿Deberías gritar
pidiendo ayuda a los cazadores o más bien correr el riesgo de trasladarte a
otra era prehistórica? ¡Tu decisión puede llevarte a la seguridad o a quedar
perdido en el tiempo!
¿ESTÁS DISPUESTO A PLANTAR
CARA AL PELIGRO?”
En el interior del libro se puede leer la misión de esta aventura:
“Tu
misión consiste en retroceder en el tiempo hasta el período glaciar e
identificar a un misterioso animal que nuestros antepasados de entonces, mucho
antes de los albores de la historia, pintaron en la pared de una cueva.
Este animal tiene el pelo
manchado y un largo cuerno en la cabeza. Se asemeja a un unicornio. Aunque
parezca extraño, aparece entre dibujos de animales reconocibles comobisontes, caballos yrenos,
mientras que otras cuevas cercanas contienen dibujos de mamuts y rinocerontes
lanudos.
¿Es posible que los hombres
del período glaciar hayan visto un animal que los científicos actuales no
conocen?
Tu cometido es doble. En
primer lugar, debes ver cómo expresaban su habilidad artística los pueblos
primitivos y observar cómo se desarrolló el arte del período glaciar. En
segundo lugar, debes recorrer el mundo estudiando la fauna de la época y ver
qué animales dibujaron los habitantes de aquel período. A medida que
investigues para identificar los dibujos y a sus autores, tendrás que hacer
frente a bestias feroces, a culturas primitivas hostiles y al clima más
riguroso que La Tierra haya conocido.”
Es una misión muy peligrosa ir a tan atrás en el tiempo. Las teorías
indican que cualquier movimiento en un pasado tan remoto podría cambiar toda la
historia, pues quizás un antepasado hubiera hecho una cosa que no hubiera hecho
sin la presencia de seres extraños y podría ocasionar un cambio radical en el
futuro. Cuanto más atrás, más peligroso puede ser el cambio. Ahora bien, en
esta ocasión realmente no se trata de ir con tanto peligro; incluso hay un
momento en el que el viajero del tiempo golpea a un cazador. La misión es
curiosa: ¿existieron los unicornios? (Cuidado: spoilers). Ojalá hubiera sido
así. Ojalá la magia hubiera reinado en este mundo tal y como hemos visto en las
películas y en los dibujos animados. Pero este libro intenta ser bastante fiel
a los estudios científicos de la época. El resultado final es que dibujaron a
un hombre disfrazado de animal con un cuerno, pues en aquella época sí que
existían ya los rinocerontes o seres similares.
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